18 de Marzo, 2012 - [ En Inglés / In English ]

Escrito por el Padre Larry Gillick, de la Compañía de Jesús.
El Centro Deglman de la Espiritualidad de San Ignacio
Para ver más información y fotografía del escritor haga clic aquí.

LECTURAS

Cuarto Domingo de Cuaresma
[32] 2 Crónicas 36:14-16, 19-23
Salmo137:1-2,3-4,6
Efesios 2:4-10
San Juan  3:14-21

Prep-oración

Estamos invitados a orarle al Dios de paz con el gozo que viene del reconciliarnos con Dios por medio de Jesús. Oramos con una nueva noción del Dios de paz, cuyo trabajo constaste es para nuestro desarrollo como creación que da como resultado una unión pacifica.

Se nos pide orar con entusiasmo para celebrar las realidades de la Pascua. Hay una vieja frase Latina, “Date prisa, poco, a poco.” Podemos orar con paciencia y perdurar en estos días de vigilia con la persona que Dios dice que somos en nuestros Bautismos.

Podemos reflejar también en nuestra necesidad de un Salvador, un Jesús que nos libere. También Podemos orar para tener un sentido mas profundo de que partes nuestras vidas todavía no están vivas.

Reflexion

La Navidad pasada celebramos que La Palabra de Dios se encarno en el cuerpo de una simple, pero humana niña de Nazaret. El Infinito Santo vino para empezar la construcción del mundo como Reino de Dios. 

Este gran tema de Navidad abarca las tres lecturas de la liturgia de hoy. La Segunda Lectura de los Efesios, que no necesita ningún comentario o reflexión por parte mía, debe ser leída lentamente en nuestras congregaciones. Esta llena de declaraciones, teológicamente importantes, y a los mismos tiempos simples. Será fácil de olvidar después de haber escuchado el drama de la Primera Lectura. Si en sus parroquias se lee rápido, párense, y digan “¿Que dijeron?”

Los libros de Las Crónicas relacionan las subidas y bajadas de la nación de Israel y de sus reyes y de sus enemigos. Esta historia nacional termina con una historia más breve de la que leemos en el capitulo de esta liturgia. Vaya que tiene un final feliz y lleno de bendiciones que es resaltado por los forasteros que entrar para salvarlos, pero aun hay mas, empieza para ellos el contacto con su pasado religioso.

Jeremías y otros profetas, llegaron como mensajeros para recordarle a Israel de su dignidad, pero como escuchamos en esta sección del último capitulo del Segundo Libro de las Crónicas, estos mensajeros sufrieron de burlas, fueron menospreciados y reprochados. Los lideres religiosos y la gente se rebeló y ensuciaron el Sagradísimo Templo.  Por esta dureza de corazón, fueron invadidos y llevados en cautiverio. Este es el resultado del pecado, pero Dios usa esto para revelar Quien Dios es, y como Dios quiere ser conocido. Cautiverio, distancia de la tierra natal, oscuridad del espíritu, todo se convierte en escenario para escribir más de esta historia. Ciro, un rey Persa poderoso invade Babilonia, y no tan solo, escuchen esto, no tan solo libera a Israel, una nación extranjera, pero triunfa diciendo, que el Dios que le dio todo este poder le ha pedido que le construya a Dios una nueva casa en Jerusalén. El antiguo templo fue destruido durante la invasión anterior. ¡Ah pero, hay mas!

“¡Quien de entre ustedes pertenezca a su pueblo, sea su Dios con él y suba!” ¡Sorprendente! El vencedor sabe Quien le ha dado su poder y libera a los cautivos y los manda en camino a un nuevo templo que el construyo. Ahora, La Segunda Lectura será mas clara y llevara a un entendimiento mas pleno del Evangelio.

Jesús continúa su plática con Nicodemo que ha venido, durante esta noche oscura, a escuchar a Jesús hablar de la vida eternal, y aun más, acerca de Jesús mismo. Le da a Nicodemo una plática muy larga en el Evangelio de hoy.

Primero le pide a su oyente que recordara como Moisés, el gran líder Judío salvo a su gente al levantar la imagen de la serpiente y todos que la vieron fueron sanados. Usando esta referencia histórica, Jesús indica que El, también, será levantado (en la cruz) para sanar a todos aquellos que Lo vean con ojos de fe. Esto de creer/ver en Jesús, Quien ha sido envidado, llevara a la vida eterna. Dios ha mandado el Hijo con el puro propósito de construir una “casa” donde Dios estará entre ellos; recuerden el último versículo de nuestra Primera Lectura. Jesús ha venido a ser el Nuevo Templo y aun sigue con nosotros.

Un tema muy obvio en El Evangelio de San Juan es el que Jesús es la “luz.” Cosas malas suceden en este Evangelio durante la noche o en las “tinieblas.” Recuerdan, Nicodemo ha venido a visitar a Jesús durante la noche. San Juan usa este simbolismo para presentar a Jesús como El que ha venido por las tinieblas del mundo para iluminar al mundo que tan amados son todos. Hay aquellos que escogen las tinieblas y por eso siguen sin saber que son amados. Estos escogen los trabajos apropiados de las tinieblas. El mal real esta en  aquellos que escogen la maldad de nos saber, aceptar y vivir sus verdades como amados y salvados en Cristo.

El resultado de este Evangelio es que aquellos que saben quienes son en la luz de Cristo desearan en una manera mas clara que sus identidades muestren los hechos de “luz” en sus vidas. Esta conversión es también verdadera. Sino sabemos, o nos rehusamos a aceptar quienes somos, entonces esa oscuridad personal jugara a las escondidillas con nuestras vidas. Ellos buscaran esconderse y en secreto esperaran que su egoísmo nunca sea descubierto.

Con pena recuerdo al niño de siete años que se robo una naranja de la tiendita, la puso en su mano izquierda, la guardo atrás de su espalda y con un ceñido camino hacia la puerta trasera. Es muy difícil abrir la puerta trasera con una mano cuando la otra esta ocupada con la obra maligna.

El dueño fue y pregunto con amabilidad por que no me había ido por la puerta de enfrente, pues el sabia que hubiera tenido que pasar por la caja registradora. El sabía lo que estaba tratando de hacer y el me dijo que era mas fácil de abrir con las dos manos. Le dije que me iba ir por la otra puerta, y todo ceñido, camine cerca de las naranjas y disimuladamente deposite la fruta fatal de regreso a su caja. Obviamente asumí que el dueño no me vio haciendo eso.  

Yo, aligerado de la naranja y aligerado del espíritu, camine hacia la luz de la calle Vilet, con más sabiduría por haber chapoteado la oscuridad. Aprendí esa lección una vez y para siempre.

Es un consuelo misericordioso el saber, que como Nicodemo, podemos ir a Jesús para salir de la oscuridad, y por que El es la Luz del Amor, podemos verlo Levantado en la cruz y salirnos de la oscuridad hacia la luz de nuestra calle Vilet.

Recientemente, nuestra pequeña casa aquí en el norte de Omaha fue invadida ¡Por ratones! Si, cuando agarramos el traste de la comida del perro del sótano, los ratones, que le habían estado robando al perro, siguieron con valentía la bolsa de alimento.
Sabemos que los ratones estuvieron con Noe y siguieron el mandato de las escritura de multiplicarse. Hemos tomados las medidas necesarias para sus aprendizajes de división y resta. Estamos ganando.

Nuestra reflexión de Cuaresma inspirada en los ratones, es que el sacar las raíces, la fuente, la bolsa de alimento, muy al fondo de nuestros sótanos personales llevara eventualmente como resultado a deshacernos de nuestros ratones personales espirituales que nos causan molestias y nos revuelven todo. Los profetas como Jeremías y como El mismo Jesús no están poniendo trampas en las lecturas de hoy, sino estan ofreciendo libertad de la oscuridad de nuestros sótanos.

 “En cambio, el que obra conforme a la verdad se acerca a la luz, para que se ponga de manifiesto que sus obras han sido hechas en Dios.”
Juan 3, 21