Reflexiones Dominicales
Del Ministerio en línea De la Universidad de Creighton

10 de Abril, 2011 - [ En Inglés / In English ]

Escrito por el Padre Larry Gillick, de la Compañía de Jesús.
El Centro Deglman de la Espiritualidad de San Ignacio
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Quinto Domingo de Cuaresma

LECTURAS

[34] Ezequiel 37:12-14
Salmo 130:1-2, 3-4, 5-6, 7-8
Romanos 8:8-11
San Juan 11:1-45 o 11:3-7, 17, 20-27, 33b-45

Prep-oración

Para aquellos que se preparan para entrar a la Iglesia Católica en La Vigilia Pascual, las lecturas para hoy forman el contexto del Segundo Domingo de “Las Inspecciones”. A los candidatos que van a entrar se les pregunto, propiamente, se les invito a declarar su creencia en Jesús como Aquel quien ha sido enviado. La comunidad también será recordada de declarar su aceptación de Jesús como el Señor.

Nos preparamos para celebrar la Vida, Muerte, y Resurrección de Jesús en la Eucaristía, celebrando como por medio de Jesús hemos llegado a vernos a nosotros mismos, a otros, y a toda la creación como regales maravillosos. Jesús nos ofrece también una nueva perspectiva de la vida, muerte y resurrección. Hemos sido llamados y escogidos, no por nuestras preferencias, nuestros logros, linaje de familia o atractivos personales. El Amor de Dios es ciego a tales categorías “plásticas”.

Oremos para recibir más de la Luz, visión, claridad, y sensibilidad con los cuales Jesús vino y vino para dárnoslos y compartirlos. El problema que tenemos es que estamos acostumbrados a vernos a nosotros mismos, a otros, a Dios y la vida en sí, en una forma negativa. Oremos para que ser paciente y que se nos quite la ceguera en nuestro proceso de recuperación.

Reflexión

El capítulo de donde tomaron nuestra Primera Lectura, empieza cuando el profeta Ezequiel es arrojado a un valle de huesos secos. El soplo sobre los huesos y les ordeno que se reunieran hasta formar un cuerpo completo. Estos huesos son toda La Casa de Israel exiliada de Babilonia, donde se encuentra su tierra natal.

Lo que escuchamos en nuestras lecturas es una continuación de esta profecía. Dios abrirá las tumbas y llamara a todos aquellos que han muerto. Otra vez, esto está dirigido a toda la gente en exilio. Dios anuncia que Dios lo hará todo, los sacara y los regresara a su tierra natal.

La tierra es una presencia sagrada y esta es la segunda vez que Dios libera a Israel del exilio o de la esclavitud. Estamos invitados más de dos veces a regresar a la Sagrada Presencia de la parte más Baja de nuestro ser. Dios no nos abandona, sino constantemente nos invita hacia un modelo relacional de Dios.

Hoy tenemos un Evangelio largo con varios puntos importantes. Aquí hay algunas ideas de reflexión que puede que lleguen a preguntarse de que se trata toda esta historia.

1. La historia es acerca de la muerte y resurrección.
2. La historia es como El Jesús persona está con Su Amor.
3. La historia es acerca del llamado que Jesús nos hace para sacarnos de nuestras tumbas.
4. La historia se trata de Jesús siendo La Luz y La vida.
5. La historia es acerca del rol de las “señales” o los “hechos” que Jesús hace para que los judíos crean en El.

Los elementos previamente mencionados están esparcidos por todo el Evangelio de San Juan. Hubo un hombre ciego para que Jesús pudiera ser “visto” y ser visto como “El Que ha sido Envido.” Hubo hambre y falta de pan para que Jesús pudiera ser comido y tomado interiormente. Hubo sed para que Jesús pudiera ser revelado como “El Agua Viva”. Aquí hubo muerto para que Jesús pudiera traer “vida” a este mundo.

Todas estas historias acerca de Jesús haciendo milagros terminan con algún tipo de declaración de fe. “Ahora muchos Judíos que se acercaron a María y que vieron lo que El había hecho empezaron a creer en El.” La temática de “ven y veras” la cual se encuentra desde el principio del Evangelio crea una energía dramática dentro de cada historia.

Nosotros, La Iglesia, y aquellos que están a punto de entrar a la Iglesia, estamos siendo invitados a creer en Jesús como el Salvador, El que sigue siendo Enviado, El Abrazo de Dios para nuestra humanidad llena de lodo. El próximo Domingo será el Primer Domingo de La Pasión de Nuestro Señor Jesucristo, donde comenzaremos a recordar la triunfante entrada de Jesús a Jerusalén cuando la gente alzaba sus palmas. Si hoy en dos semanas celebraremos Su Resurrección, se no ha pedido reflexionar acerca de nuestra fe, que nos invita a través de nuestros Domingos de Pasión, Lunes y por siguientes. El seguir a Jesús siempre nos causara conflictos con las injusticias, las crueldades, las invitaciones a caminar en otros senderos y pasar por desapercibidos el camino hacia Jerusalén.

Nos consolara el hecho de que los apóstoles abandonaron a Jesús y que Jesús fue en búsqueda de ellos hasta encontrarlos, El los manda a vivir La Buena Nueva. El leer historias de los primeros y recientes mártires, nos hace preguntarnos si nosotros hubiéramos hecho lo mismo si estuviéramos en sus zapatos. Muchos creyentes viven el martirio diario de la fidelidad. La Fe es un regalo tremendo que sobrepasa la mente y de alguna manera le permite al alma ignorar las exigencias de la razón y la emoción.

En cualquier lugar donde estemos reunidos como comunidad de fe, estaremos reunidos por gente que también ya ha sido probada en su fe, que han salido fuera del alcance de las tumbas de sus propias tentaciones y sufrimientos. Jesús llamó a Lázaro, los apóstoles, el ciego, la mujer adultera, y a otros a creer, no solamente en El, pero en sus seres para buscar y compartir en sus vidas sus creencias.

“En El se encuentra la misericordia y la redención en abundancia” Salmo 130, 1

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