Reflexiones Dominicales
Del Ministerio en línea De la Universidad de Creighton

8 de Mayo, 2011- [ En Inglés / In English ]

Escrito por el Padre Larry Gillick, de la Compañía de Jesús.
El Centro Deglman de la Espiritualidad de San Ignacio
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Tercer Domingo de Pascua

LECTURAS

Hechos 2:14, 22-33
Salmo 16:1-2a+5, 7-8, 9-10, 11;
1 Pedro 1:17-21
Lucas 24:13-35

Prep-oración

En esta parte de Estados Unidos las flores de primavera están buscando la invitación del sol para salir y derramar sus sonrisas. Hay unos vientos helados que murmuran a las flores para permanezcan dentro. La primavera por estos lares es un tiempo de tensiones.” ¿Cómo debo de vestirme hoy?” ¿Debería jugar golf hoy, o salir a caminar en la “Lluvia de Dios”?.

Hay tensiones dentro de nuestros espíritus también. La alegría de Pascua es fácilmente atenuada por nuestras experiencias diarias de cargar nuestras cruces de la vida. La renovación de nuestro bautismo es la renovación de nuestras creencias en el amor de Dios, pero para nosotros como peregrinos humanos. Podemos orar con la tensión de la naturaleza a nuestro alrededor tanto como vemos el crecimiento de las hojas o la formación de las nubes. Podemos orar con llovizna o soleado. Podemos orar con las inconsistencias del tiempo y con nuestro espíritu. La alegría de la Pascua va y viene y nos preparamos para la Eucaristía de la Consistencia de la Presencia de Dios.

Reflexión

Nuestra primera lectura comienza inmediatamente después de la experiencia del descenso del Espíritu Santo durante la celebración agricultura Judía del Pentecostés. Algunos de los que estuvieron escuchando a los discípulos hablando en varias lenguas lo explicaron todo diciendo que ellos habían estado bebiendo mucho del nuevo vino de la celebración. Pedro de pie y como escuchamos es su explicación del comportamiento inusual de los hermanos.

Pedro hizo dos cosas importantes en esta dirección. Resumió las creencias básicas Cristianas acerca de Jesús. El viene de Dios. Dios lo entrego en las manos de los judíos. Algunos de los judíos, contrario a la Ley, han crucificado a Jesús. Jesús , por el poder de Dios, hizo grandes y poderosas obras. Dios lo levanto de los poderes de la muerte, Resucitándolo.

La segunda sección de su presentación es una referencia a lo que David, el Patriarca de Israel ha dicho y lo cual Pedro aplica a Jesús. Salmos16, 11 David esta muerto y su tumba está presente, pero lo que David ha dicho fue un juramento de Dios que él habría de tener un descendiente Quien no gustaría de la muerte y este es El Cristo. El ha recibido el Espíritu Santo y ha derramado este licor sobre aquellos que creen.

El Evangelio es justamente una historia maravillosa de la Resurrección. Dos buenos seres humanos han sufrido a través de la Pasión y muerte de Jesús. A ellos sus sueños de Fe se les rompieron en pedazos. Ellos siguieron sus inclinaciones naturales de regresar a lo familiar. Ellos hicieron esto con sus caras y espíritus abatidos. Aquí está la tensión para ellos. Ellos confiaron en las enseñanzas de Jesús, su amistad e invitaciones y ahora quedaron como perdedores. Posiblemente ellos también habían dejado todo por seguir a Jesús y ahora estaban retornando a juntar todo de nuevo ellos solos.

Jesús viene a lado de ellos, pero como es normal en las narraciones durante la Resurrección, fallan en notar Su presencia real junto a ellos. El juego de Jesús es simple; El pregunta sorprendido de los dos. El resultado de la conversación se convierte en una pequeña revisión de la escritura. Como Pedro en la primera lectura usa una notación bíblica como avance de su presentación, Jesús comienza con Moisés y se mueve a través de las tradiciones bíblicas judías como avance para la aceptación de esos dos hombres de que Cristo tuvo que sufrir y morir.

Jesús permanece con ellos para la comida en la cual El transforma un intimo compartir del pan, en el cual Jesús lo bendice, lo parte y lo da a ellos, resultando que sus ojos fueron abiertos y El desapareció. ¿Cual es esta comida Eucarística? Si, en este sentido, porque fue una unión, un llamado a creer mas allá de nuestra visión, y más importante aún, porque esto culmina en un regreso a la comunidad y a la misión.

Jesús estuvo sepultado tres veces en su vida. La primera fue en el vientre de Su madre. La segunda fue cuando lo metieron a la tumba después de su muerte. La tercera está siendo sepultado en el “Partir del Pan” des pues de su Resurrección. Todas estas tres sepulturas significaron sus tres medios de estar en una “Presencia Real” dentro de nuestra humanidad. El “vientre”, la “Tumba”, y nuestro “cuerpo” están bendecidos por Su presencia. Los tres son lugares de entrega. El nació, vivió, murió, fue sepultado y resucito y con su cuerpo puede dar vida y visión a este mundo. El vientre y la tumba no lo pudieron retener. Nosotros lo podemos retener, no lo podemos retener hacia atrás, sino lo podemos retener hacia adelante, retenerlo en forma sagrada hacia Sus hermanas y hermanos. Lo podemos retener y El a nosotros conjuntamente y con un sentido de estar haciendo algo bueno. Lo retemos a Él para que así otros puedan contemplarlo a Él en cómo vivimos Su Cuerpo.

Estos dos se regresan en el camioncito que va a Jerusalén y, ya habiendo recobrando su vista, regresaron a su misión. Sus corazones ardían por dentro solo al saber en verdad quienes eran ellos. Otros han recuperado su sentido del ser y también su fragmentado y despedazado ser que fue recolectado y reformado en Jerusalén.

Es verdad que no podemos dar lo que no tenemos. Estos dos hombres de Emaus estaban en un proceso de traslado. Se les regreso su sentido de la vista y su sentido del ser. Ellos dijeron “si”, “amen”, a la verdad de Jesús que Ha resucitado y a sus verdades en sus aventuras de fe, por que donde siguieron a Jesús fue una jornada de Jesús siguiéndolos a ellos. Ellos estaban embarazados, como estuvo María, y también en la tumba, pero ahora ellos estaban vivos para darle vida, plena, para que ellos dieran vista y vida a través y dentro de la comunidad de creyentes.

“Los discípulos reconocieron a Jesús cuando partía el pan. Aleluya.” Lucas 24, 35

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